Debemos empezar este análisis diciendo que tuvimos la oportunidad de realizar un “primeras impresiones” (que os dejaremos aquí mismo) hace poco más de un mes, y ahora que hemos podido avanzar del primer acto, no podemos más que disfrutar y quedarnos perplejos ante Stray Gods: The Roleplaying Musical.
Como Summerfall Studios indica en su propio FAQ, es importante destacar que Stray Gods no es un RPG como todos conocemos. Con esto queremos decir que no tendremos misiones de recadero, niveles de experiencia, inventario o combates. El género role-playing game tiene mucho espacio para todo tipo de juegos, y en este caso nos centramos especialmente en la parte de “role-playing“. Todo se basa en decisiones, especialmente con el tono o fuerza en el que queramos enfocar las conversaciones. Y todas ellas tienen consecuencias, algunas buenas, otras malas y unas pocas… terribles.
Esto es lo más importante a destacar junto a cómo se siente el componente musical en Stray Gods. Hemos conocido muchos juegos de música y de ritmo a lo largo de la historia de los videojuegos, desde Guitar Hero o Just Dance, hasta Patapon pasando por una ristra interminable de títulos. Pero estamos ante un juego cuyo corazón no es la parte jugable de la música (pues no tiene como tal), sino el propio concepto de que todo sea una gran obra musical, y cómo todo encaja perfectamente en el ritmo y sentimiento que pretende mostrar.
¿Una historia contada? Más bien cantada
Desde que comenzamos la partida, vemos que el juego no se aleja de lo que muchos conocen como novela visual: conversaciones entre personajes y toma de decisiones a la hora de hablar con ellos. Pero esto es solo una parte (digamos que el 60% del juego), pues el resto lo descubriremos en su apartado más melódico y divertido (el 40% restante).
Como si de un musical se tratase, los personajes se conocerán y abrirán sus corazones gracias al poder que Grace (nuestra protagonista) recibirá tras la muerte de Calliope. Pues todo gira en torno al asesinato de la musa anteriormente mencionada, lo que causará todo un revuelo en el panteón de dioses griegos. ¿Como te sentirías si tras conocer a alguien, es asesinado y su poder como dios pasara a ti? ¿Y si además de lo anterior, el resto de dioses del Chorus (coro) quisieran matarte porque piensan que eres la asesina?
Desde luego Stray Gods empieza fuerte, pero Grace es capaz de anteponerse a todo, especialmente con nuestra ayuda. Su (nuestra) historia nos llevará a descubrir sus poderes como la nueva musa, el estado actual de las divinidades y ganarse el perdón de su sentencia mortal descubriendo al asesino de Calliope. Todo esto nos presenta un concepto actual de cómo estas divinidades han sobrevivido al paso de tantos años.
Los personajes de Stray Gods: reinventando a los dioses
Algo que nos ha parecido bastante interesante es el diseño de los distintos personajes principales con los que interactuamos durante la historia. Aunque comenzaremos la partida solo con nuestros compañeros de banda, no tardaremos en conocer a Calliope. Gracias a su desafortunado “destino” tendremos la oportunidad de ver al resto del elenco. Empezando por Hermes, que será el encargado de recogernos y llevarnos a Olympus.
Cada personaje tiene su pasado, algo oscuro que esconden o de lo que se arrepienten y que podremos conocer a medida que interactuamos (y cantamos) con ellos. Así conoceremos las motivaciones e historia de los demás según juguemos.
Los cuatro miembros del Chorus serán los principales y más importantes al inicio (aunque no los únicos). Este grupo, que parece ser el que toma decisiones y controla a la par que imparte justicia al selecto grupo de las divinidades, está formado por Athena, Persephone, Aphrodite y Apollo. Atenea, Perséfone, Afrodita y Apolo traducidos al español, vaya.
Aunque no pretendemos spoilearos el juego (de hecho todo el análisis evita completamente spoilers en lo referente a lo que puedas descubrir) sí que os hablaremos un poco de estos personajes.
Mortales y divinidades
Dentro de los mortales, tendremos a nuestra mejor amiga, Freddie, compañera de piso y jefa de la banda. Es la primera interesada en que todo nos salga bien y encontremos nuestro lugar en el mundo, y nos apoyará tras el inicio del juego. Más adelante conoceremos a otros personajes como “el oráculo” que vive en la casa de Apollo y nos proporcionará información a su manera.
En cuanto a las divinidades (Idols como se llaman en el juego, aunque no como famosos sino como seres a venerar), conoceremos a muchos y todos tendrán sus razones (ocultas o no) para ser y actuar como lo hacen. Athena demuestra ser justa y cerrada de mente, y será la persona principal a la que tendremos que convencer de que somos inocentes. Apollo por otro lado aunque triste a su manera, con su personalidad algo más cálida busca nuestra salvación lo que será el inicio de la misma.
Persephone, por otro lado es un personaje temperamental y al que aparentemente todo el mundo odia. ¿La razón? Tendréis que jugarlo y descubrirlo por vosotros mismos, pero desde luego supuso un antes y después en cuanto a la justicia que imparten. Y Aphrodite es… un tema difícil de tratar sin revelar nada; claramente experimentaremos uno de los grandes momentos del juego (con decisiones importantes involucradas).
Habiendo hablado del grupo principal, conoceremos a muchos otros personajes, como Eros o Pan que tendrán un papel en nuestra historia y desenlace, o en la vida de las divinidades principales. Todos ellos tienen un diseño muy peculiar e interesante.
¿Cómo es la jugabilidad y la toma de decisiones?
Recordemos que el juego se basa en la toma de decisiones y estas nos llevan a distintos desenlaces e historias. Al inicio del mismo tendremos que elegir cuál es la personalidad principal de nuestro personaje entre tres opciones: encantadora, temperamental o astuta.
Elegir una de las tres definirá parte de las decisiones y desbloqueará (o bloqueará, según se mire) ciertas conversaciones y respuestas basadas en ello. Aun así, en las partes donde los personajes empiezan a cantar e interactuar entre sí, podremos elegir muchas veces entre las tres personalidades, siendo esto de vital importancia ya que influirá en el desenlace del acto.
Tenemos la opción de quitar las decisiones que van con límite de tiempo, pero pensamos que parte del encanto es decidir rápido, más con el corazón que con la mente. En esos momentos no tienes tiempo para planificar realmente, sino para sentir y entender lo que intentan comunicar y fluir con ello.
Aunque el juego nos guía casi todo el rato, habrá ocasiones en las que podremos decidir si visitar una localización antes que otra, pudiendo así descubrir alguna pista más o conocer algo nuevo de otro personaje haciendo la experiencia más completa.
Stray Gods: artísticamente una delicia
Finalmente, vamos a hablar de como es artísticamente. Para empezar, el juego está diseñado de forma que los personajes no se mueven, no son un objeto móvil en un motor de juego, sino que se nos presentan viñetas con múltiples caras, gestos y movimientos que se sienten como leer un muy buen cómic.
El diseño de los personajes es muy acertado, especialmente con sus personalidades y cuadra perfectamente con lo que podríamos imaginar si la corriente actual social hubiese afectado en forma y personalidad a la creencia de dichas deidades.
Y hablar del apartado musical es… bueno, algo que posiblemente un experto pudiera explicar con mejores palabras de lo que vamos a hacer aquí hoy pero… es impresionante. Se siente y entiende perfectamente lo que se quiere comunicar en cada acto musical. Se vive perfectamente cuando un momento es triste, cuando algo da rabia o simplemente es una pelea de egos para ver quien tiene razón. En general se disfruta de principio a fin, es fácil quedarse embobado pensando que estamos viendo un musical con una fuerte historia hasta que te toca volver a elegir que decir.
Stray Gods: The Roleplaying Musical: El juego es único a su manera, algo que todo el mundo debería poder experimentar una vez en su vida. La montaña rusa de emociones, mentiras y verdades dolorosas acompañadas de una banda sonora y apartado musical espectacular hace de este juego algo increíble. Sin olvidarnos de su diseño artístico, que es algo más que a la altura. Lo recomendamos de corazón. – Ramón Cabilla “DaRKKoNNaN”
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