Frogun: Un plataformas muy retro – Análisis

Esta semana os traemos un juego recién salido del horno por parte de Molegato y de Top Hat Studios, el plataformas con toque retro: “Frogun”.

Este juego es un regreso al pasado, ya que nos trae recuerdos de aquellos juegos que jugábamos en PlayStation o Nintendo 64. En cuanto lo jugamos, nos sentimos así.

Veremos similitud con muchos juegos del género de plataformas, como “Crash Bandicoot”, “Spyro the Dragon” o incluso el propio “Super Mario 64”. Desde ya os aseguramos que tenemos ante nosotros un título súper divertido y muy desafiante.

Comienza la aventura

En este título nos pondremos en la piel de Renata, la joven hija de una pareja de arqueólogos e inventores, que tras pasar dos días sola en casa, decide salir a buscarlos.

Siguiendo su última pista, nuestra joven protagonista se embarcará en la búsqueda de sus padres por parajes de todo tipo: cuevas, selva, ruinas, etc.

En su viaje Renata no estará sola, ya que contará con la ayuda del último invento creado por sus padres: la pistola rana (también conocida como “Frogun”).

Nuestra pistola puede usarse para muchas cosas. Por ejemplo: coger objetos, usarla como gancho o como arma con la que eliminar a nuestros enemigos.

A modo de tutorial o consejos, la pistola nos puede aportar información de gran utilidad, con el fin de que el jugador logre completar con éxito los niveles. Siempre que veamos un bocadillo de diálogo con la cara de la rana y lo toquemos, tendremos acceso a dicha información.

Lara Croft a mi lado se queda en pañales

Nuestra misión principal en el juego será encontrar a nuestros padres pero no será la única. Renata, al haber crecido entre arqueólogos, conoce bien la profesión, por lo que mientras avanza en su misión también irá haciendo descubrimientos.

En cada nivel podemos descubrir hasta 4 tipos de objetos coleccionables. Estos son las monedas, las notas de investigación, las esmeraldas y las calaveras de obsidiana.

El objeto más fácil de conseguir será las monedas, distribuidas por todo el nivel, ya sea a simple vista o dentro de diferentes objetos, como vasijas, cofres o jarrones. Hay cinco tipos de monedas, diferenciadas por color y valor.

Las notas de investigación y las esmeraldas nos pondrán a prueba, pero no estarán a la altura de la calavera de obsidiana, la cual solo puede conseguirse tras entrar por un agujero bien oculto y completar un desafío.

Sin lugar a dudas, estos coleccionables nos mantendrán entretenidos y en más de una ocasión conseguirán sacarnos de nuestras casillas. Avisados quedáis.

A modo de premio, aquellos jugadores que logren superar los niveles con todos los objetivos conseguidos, podrán abrir unos cofres especiales que se encuentran en el mapa de selección de nivel. Estos cofres nos otorgarán mejoras de salud o sombreros con los que ir a la moda.

Un mundo enorme por descubrir

Aunque el juego pueda parecer corto, no os confiéis. Según nuestra habilidad y destreza, tardaremos entre uno y ocho minutos en completar un simple nivel.

Eso dependerá del objetivo que nos hayamos fijado para completarlo, ya sea que Renata no muera, conseguir todos los coleccionables o acabarlo en el menor tiempo posible.

“Frogun” se divide en varios mundos o zonas con un número determinado de niveles. La gran mayoría de niveles siguen la misma dinámica de juego, pero hay un par de excepciones.

Cada mundo cuenta con un jefe al que tenemos que eliminar para seguir avanzando en nuestro viaje. Cada uno de ellos tiene su propio patrón de ataque, por lo que hay que aprendérselo bien para acabar con él. Una vez le pillemos el truco, será coser y cantar.

La otra excepción la vemos con Jake, un chico con una pistola serpiente (alguien conoce el invento de tu familia, Renata). Siempre que lo veamos nos hará correr contra él, poniéndonos a prueba para ver si llegamos a la meta antes que él. En estos niveles saldrá a flote nuestro modo competitivo, os lo garantizamos.

Apartado técnico de Frogun

“Frogun” corre en cualquier PC con una gráfica decente, ya que no requiere de muchos recursos.

Aunque pueda parecer un juego simplón, es bastante vistoso y bonito. Sus decorados están bien hechos y llenos de color, mientras que sus personajes son muy graciosos.

En cuanto a su historia, es un juego con una trama sencilla y casi inexistente. De hecho, si no es por las notas de investigación ocultas en cada uno de los niveles, apenas sabríamos nada de su argumento.

Sus melodías son agradables al oído y no se hacen pesadas en ningún momento, siguiendo el modelo musical de este tipo de juegos.

Su jugabilidad es bastante sencilla pero en ningún momento aburre. Renata solo cuenta con tres acciones (saltar, apuntar y disparar) pero gracias a la arquitectura de los escenarios y a la pistola rana, la jugabilidad se enriquece.

Eso sí, consideramos que la cámara no esta bien implementada, ya que nos afecta a la hora de jugar, al igual que el apuntado. Destacamos que podamos manejarlos por nuestra cuenta y rotarlos a 360º pero una cámara y un apuntado fijo serían todo un acierto para el juego.

Su dificultad va en constante aumento pero creemos que se debe en parte a lo citado en el párrafo anterior, ya que ciertos niveles nos ha costado horrores superarlos.

Consideramos que es un juego con mucha vida y rejugabilidad, ya que si queremos completarlo al 100% nos tocará completar todos los niveles a la perfección y esta proeza nos llevará bastante tiempo. Además, incluye un modo para dos jugadores, donde podemos competir con nuestros amigos para ver quien llega antes la meta, tal y como nos ocurre con Jake el corredor.

También encontraremos el modo fotografía en el menú de pausa, pudiendo poner a posar a Renata y sacando nuestras propias instantáneas.

El juego esta traducido al castellano pero no cuenta con doblaje de ningún tipo, ya que no lo necesita. Se puede jugar con teclado y ratón o en su caso, con mando.

Por último, el titulo cuenta con cuatro ranuras de partida, evitando así que alguien pueda borrar nuestro progreso.

Conclusión

“Frogun” es un titulo sencillo pero efectivo, que gracias al factor nostalgia, conseguirá dejar huella en los jugadores que lo prueben.

Ofrece muchas horas de diversión y entretenimiento, una jugabilidad sencilla y divertida y sobre todo, transmite pasión por los videojuegos de antaño.

No tenemos queja alguna sobre el juego, a excepción del problema con el apuntado y la cámara. Por lo demás, lo recomendamos al 100%.