Uno de los puntos más controvertidos del último título de Turtle Rock Studios residía en su desequilibrada dificultad.
El pasado día 12 Back 4 Blood llegó al mercado dispuesto a convertirse en el Left 4 Dead 3 que todos llevaban años esperando. Cierto es que el juego ha cosechado opiniones mixtas, dividiendo a quienes lo consideran un sucesor digno de la entrega cooperativa de Valve y los que aseguran que le falta la esencia del original. No obstante, si en algo coinciden estas dos partes es en el nivel de dificultad del título, sobre todo en niveles por encima del modo “recluta”.
Un reajuste en la dificultad
Si hay algo que lleva chirriando a los jugadores de Back 4 Blood desde que viera la luz en forma de beta, ha sido su desequilibrio en dificultad. Y es que tal como ha reportado la comunidad, el título carecía de ningún tipo de desafío en su modo de dificultad mínimo. Pero se volvía una pesadilla prácticamente inabarcable en su nivel inmediatamente superior. Afortunadamente Turtle Rock Studios se ha hecho eco de este problema y ha ajustado este punto, moderando la frecuencia con la que aparecen mutantes especiales en los modos más altos de dificultad. Eso sí, si posees el título y ves que no tienes ninguna actualización pendiente, no temas. Estos cambios no requieren instalación de ningún parche, pues estos han sido aplicados a nivel del mismo servidor, tanto en versión PC como de consolas.
Vuelta a la acción cooperativa por excelencia
Back 4 Blood es un título cooperativo que toma la base de Left 4 Dead y la actualiza tanto a nivel gráfico como jugable. Uno de los añadidos más interesantes es la modificación de cada partida por medio de cartas. Estas pueden afectar de forma negativa a la partida, potenciando la agresividad de los enemigos o la cantidad de estos. Aunque también podemos compensar estos efectos con otras que nos otorguen distintas habilidades, como mayor capacidad de munición o más resistencia.
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