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Forgive Me Father: Una frenética locura (Análisis)

Forgive Me Father claramente toma como fuente de inspiración a los clásicos Doom, Quake o Wolfenstein y quizás sea en estos momentos el que en jugabilidad mejor representa a estos legendarios títulos.

Desarrollado por el estudio polaco Byte Barrel y el editor 1C Entertainment, llega hasta nuestras manos este frenético juego de acción y disparos en primera persona, con una peculiar estética de cómic retro e inspirado por las novelas de H.P. Lovecraft que logrará acelerar tu pulso a ritmo de música brutalmente cañera.

Pelearemos contra bestias y seres salidos de nuestras peores pesadillas y como no, de la mente del creador de Cthulhu, en una aventura en la que encarnamos a un sacerdote o a una periodista a lo largo de enrevesados niveles llenos de trampas y secretos mientras investigamos la desaparición de un pariente cercano.

Bienvenidos a una locura intensa y muy frenética…

Las referencias a los grandes escritores de lo oculto y terror como Poe y Lovecraft son constantes

Una ciudad que apesta a muerte

Y no solo a muerte, si no también a putrefacción, la de los zombies que buscan deleitarse con nosotros quizás…o las de ciertos horrores a medio mutar, quien sabe si los vómitos radioactivos de algunos seres y otros ataques de los cientos de horrores lovecraftianos que nos iremos encontrando a lo largo de los veinticinco niveles con los que cuenta Forgive Me Father.

Pero lo que mas apesta de todo, es la historia llena de conspiración que iremos descubriendo en torno a la desaparición de nuestro primo, que si bien al final terminaremos por saltárnosla para ir directos a la acción, hace mención a sectas, cultos y todo lo normal en este tipo de historias de terror y misterio.

Si ser la historia es muy profunda, ni falta que hace, hay algunos giros de guión interesantes que…hasta aquí puedo leer.

Con su estética de cómic al estilo “Pulp”, el juego resulta de lo más simple y llamativo

Perdóneme Padre…

Ya seas un sacerdote que ahoga sus penas en alcohol y con menos fe que el Padre Karras, o te pongas en la piel de una perspicaz periodista con ganas de investigar y descubrir que está ocurriendo, la historia de Forgive Me Father apenas cambiará de uno a otro más allá de sus diálogos o un poco la jugabilidad.

En la jugabilidad notaremos la mayor diferencia entre el cura y la periodista a la hora de enfrentar a los enemigos, que con ella será de una forma más intensa y agresiva, mientras que por la parte eclesiástica será ideal para jugadores que prefieran jugar de forma más defensiva

Comenzamos en una habitación en la pensión en la que nos hospedamos y tras salir por la puerta, comenzará la acción pura y dura con oleadas de enemigos.

Mientras vamos terminando con dichos enemigos, nos irán dejando salud para reponer. También encontraremos munición repartida por las distintas salas que visitaremos y muchas armas distintas, a cada cual con más potencia de fuego.

Por otro lado, daremos con puertas que requerirán de ciertas llaves de colores que solo podrán ser abiertas al encontrar la pertinente llave. Dichas puertas nos pueden llevar a salas con muchos más enemigos o simplemente nos permite continuar el nivel.

Por suerte contaremos con puntos de guardado cada cierto tiempo, cómo no, con forma de Cthulhu

…porque he pecado.

Todos vamos a terminar pecando y mucho divirtiendonos como locos jugando Forgive Me Father, no solo por la orgía de sangre y vísceras a ritmo de “Blast Beats” que viviremos a cada momento. También gracias a cuando nuestro “medidor de locura” llegue al máximo y entremos en un estado de insania.

A medida de ir liquidando enemigos, dicho medidor se irá cargando y cuando estemos al límite, más poderosos seremos y más daño causaremos. Lo cual viene ideal cuando nos encontremos con muchos enemigos, que vaya si lo haremos y moriremos muchas veces.

Por suerte, contamos con puntos de guardado como el de la captura de arriba y también los ya mencionados puntos de salud y la munición para reponer nuestras armas.

Ocho armas para ser exactos, que gracias al árbol de habilidades de nuestros personajes, podremos/deberemos mejorar, para de esta forma así hacer un poco más fácil nuestra visita a Pestisville y sobre todo, acabar con los jefes finales de cada zona.

De lo que si pecaremos muchas veces, será de caer en las trampas que nos tiene preparadas el juego, ya que pese a utilizar una linterna para poder ver en las zonas oscuras, el título jugará con nosotros muchas veces haciéndonos caer en dichas trampas.

Dispondremos de un árbol de habilidades que potenciará y mucho nuestro personaje y armas

Apartado Técnico

Forgive Me Father en muchos aspectos parece salido directamente de los años 90 y no solo por su estética o ser un Doom clon avanzado.

El diseño de niveles, que aunque puede terminar siendo repetitivo y hasta con un mal acabado (quizás intencionado) que le quita ritmo al juego en un par de niveles, en líneas generales cumple más que de sobra y hará que se quiera rejugar cada zona nuevamente para hacerla en menos tiempo o conseguir todos los secretos o información.

Información que a nivel narrativo es pobre, pero repito que al final queda en un segundo plano y lo importante es la experiencia de juego y el “sinsentido” de acabar con oleadas de enemigos.

Visualmente con su estética cómic “Pulp” cumple más que de sobra con su cometido y pese a no ser una técnica exigente, por desgracia sí que con una gran masificación de enemigos, he sufrido alguna ralentización o congelamiento. Pero nada grave

A nivel sonoro también puede llegar a saturar el estilo musical elegido, el cual no es una mala elección para un título de estas características si no todo lo contrario, pero sí que los temas Death Metal pueden volverse repetitivos.

Los efectos y sonidos en general están a la altura de las circunstancias y no se les puede sacar pega o alabar en demasía. Cumplen sin más.

El juego viene con voces en inglés y traducido al castellano, aunque muchas frases y palabras siguen en inglés.

Al entrar en el modo locura, más de uno se sentirá al igual que en un fin de semana estando de fiesta.

Conclusiones

Forgive Me Father no es un Doom clon más. Aporta mucha personalidad y estilo propio, pero si peca de ciertos problemas como la música o lo repetitivo que puede llegar a ser a la larga.

En lo repetitivo donde más evidente resulta, es con los enemigos o la falta de variedad a nivel estético en general, así como la música.

Mención aparte de la dificultad, que hasta en el modo más simple (si, he tenido que bajar la dificultad para poder avanzar), el juego se vuelve por momentos tedioso e insoportable con sus trampas y dificultad en general.

Lo más seguro que los amantes de morir mil veces en juego se lo pasarán genial con este título y en general todos aquellos que sean amantes de Doom, Unreal y Quake.

Algo que sí está claro es que Forgive Me Father es divertido a rabiar y a nivel visual, con los horrores salidos de la mente de H.P. Lovecraft, va a costar olvidar este juego.

Forgive Me Father: Forgive Me Father no es un "Doom clon" más. Su estética de comic retro, música cañera y sobre todo su acción frenética, acelerarán tu pulso hasta límites insospechados en un mundo lovecraftniano. Jose Aguirre “Joshkerr”

6.5
von 10
2022-05-19T16:48:37+0200

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