Art of rally se nos presenta dentro del genero de la conducción con vista isométrica a medio camino entre la simulación y arcade, inspirado en los primeros Collin McRae y otros juegos de rally de principios del año 2000.

En art of rally entramos en un mundo paralelo donde los coches clásicos de rally no han desaparecido y podemos usarlos a nuestro antojo y competir para llevarnos la gloria.

Y que mejor autoescuela para practicar que en un mundo abierto. Después de haber practicado sin ningún tipo de tutorial y por nuestra propia cuenta, nos meteremos de lleno en la una campaña ficticia ,progresar por la edad dorada del rally, empezando por el grupo 2, coches de finales de los años 60, hasta llegar a lo mas alto del grupo A de mediados de los 90.
En cada campeonato (grupo), tendremos varias etapas, de las 60 que hay en total, repartidas por Japón, Finlandia, Cerdeña o Alemania y conseguir mejor tiempo que la IA para alzarnos con la victoria. Pudiendo desbloquear los más de 50 coches disponibles, pintura y nuevas etapas en las que progresar.

También dispondremos de otros modos de juego como participar en carreras diarias y semanales para picarnos con otros jugadores donde es necesario dominar el juego y ver quien realiza el mejor tiempo posible.
Por otra parte, tendremos un mundo abierto en el que podemos correr por donde nos plazca, recogiendo coleccionables, poner a prueba nuestra pericia con los coches desbloqueados y dar uso a nuestra imaginación con un modo foto muy completo.

 

Jugablemente el titulo no tiene nada que envidiar a otros simuladores de conducción, si bien art of rally se enfoca en una conducción mas arcade, nos encontramos ante un juego con un control exquisito que hará las delicias de los fans, pudiendo tomar curvas imposibles una vez hayamos dominado el control del juego.
Como bien decía que el juego se encuentra a medio camino de la simulación, el juego nos permite el control del ABS o del ESP para encontrar una conducción más realista para el jugador, modificar la dificultad de la IA, la cual realizará tiempos mejores o el sistema de daños, el cual afectará negativamente a la hora de conducir el coche.

Visualmente el juego es muy simple y queda alejado de otros referentes dentro del genero de la conducción, pero con la estética minimalista que nos presentan encaja perfectamente para no perder de vista al coche ni a la carretera.
Sin mostramos grandes detalles el juego se apaña perfectamente para mostrarnos todo lo que necesitamos con el uso de su cámara isométrica, la cual podremos ajustar, podemos anticiparnos sin problema alguno a la próxima curva o ver los paisajes, perfectamente diferenciados, en los que transcurren las etapas y con un HUD simple pero efectivo en el que se nos muestra detalles como el cuenta kilómetros o el tiempo transcurrido.
Los amantes de la música synthwave disfrutarán de su BSO, aunque en sesiones largas se puede llegar a hacer pesada y acabaremos por desactivarla solamente para oír el rugido de nuestro coche.

En definitiva, los amantes del genero de conducción encontraran en art of rally un genial arcade donde el dominio del derrape a nuestros mandos será esencial para alzarnos con la victoria y visualmente llamativo enseñándonos postales en movimiento gracias a su estética minimalista y una extensa campaña.